El expresidente de Uruguay Tabaré Vázquez sufrió una trombosis y permanecía «estable», informaron hoy fuentes familiares después de que la prensa local reflejara preocupación por su estado.
Vázquez, quien tiene 80 años y cáncer de pulmón, sufrió una «trombosis profunda en la pierna izquierda» y «está muy bien, está hablando como todos los días con nosotros», afirmó este mediodía su hijo mayor, Álvaro, médico oncólogo igual que su padre.
El exmandatario se encontraba «repasando su vida, recibiendo a algunos amigos y cuidándose mucho por la situación sanitaria», agregó su hijo, según el diario montevideano El Observador.
Familiares y vecinos se acercaron a la residencia de Vázquez en el barrio Prado, en Montevideo, y el presidente Luis Lacalle Pou y la vicepresidenta Beatriz Argimón, así como otros dirigentes políticos, llamaron por teléfono para interiorizarse por su estado.
Previamente, varios medios locales se hicieron eco de versiones que circularon en redes sociales, según las cuales Vázquez había sufrido una recaída -incluso con complicaciones- del cáncer de pulmón que le fuera diagnosticado el año pasado y por el que hizo un tratamiento de radioterapia.
Todavía en el Gobierno, Vázquez anunció el 20 de agosto de 2019 que le había sido detectado un tumor en su pulmón derecho.
Dos días después se internó en un hospital de la capital para practicarse estudios adicionales que confirmaron la presencia de un tumor maligno y en septiembre terminó con éxito la radioterapia con radiocirugía para combatirlo.
«La ciencia permite que el cáncer sea una de las enfermedades que más se cura», dijo meses después, y manifestó el deseo de «poder ponerle la banda presidencial al próximo presidente», lo que hizo el 1 de marzo de este año al pasarle el mando a Lacalle Pou.
La última revisión a la que fue sometido, en mayo de este año, dio «resultados excelentes» al no presentar actividad tumoral.
Sin embargo, algunos allegados afirmaron al diario El País que el exmandatario sufrió algunas recaídas de su enfermedad, la última de ellas pocos días antes de las elecciones regionales del 27 de septiembre pasado.
Asimismo, Vázquez, quien también había gobernado en 2005-10, fue operado en junio pasado de un tumor benigno en la próstata que no tenía relación con su cáncer, y por el que solo estuvo internado un día.
A principios del mismo junio dio negativo a una prueba de coronavirus a la que se sometió tras haberse reunido con Lacalle Pou, quien había estado en contacto con personas infectadas pero también dio negativo.
La prensa local destacó que tras dejar la Presidencia, Vázquez se mantuvo muy activo en las cuestiones políticas del país, en particular en las gestiones del Frente Amplio.
Su próxima aparición pública estaba prevista para el lunes, día en el que el Club Atlético Progreso anunció que impondrá a su sala de teatro el nombre del exmandatario, quien presidió la institución entre 1979 y 1989.