Por Katherine Fung, de Newsweek
El éxito de Taylor Swift está generando una nueva teoría de la conspiración entre algunos seguidores del MAGA que piensan que la cantautora está siendo utilizada para interferir en las elecciones presidenciales de 2024.
El miércoles, Swift fue nombrada «Persona del año» por la revista Time. Ella formó parte de un grupo de nueve finalistas que incluía a Barbie, el rey Carlos, el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, el presidente chino Xi Jinping y el presidente ruso Vladimir Putin.
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La estrella de 34 años dominó los titulares nacionales y mundiales en 2023. Se embarcó en su muy popular Eras Tour, que se prevé que se convierta en la gira más grande de todos los tiempos y la primera en recaudar más de mil millones de dólares. La gira ha tenido profundos efectos económicos en numerosas ciudades y pueblos que experimentaron mini booms durante las paradas de su gira, e incluso la economía estadounidense en su conjunto se ha beneficiado.
Según Time, se han dedicado diez clases universitarias a Swift, y ha habido un gran aumento en la audiencia de fútbol como resultado de su relación con Travis Kelce de los Kansas City Chiefs.
Pero la decisión de darle a Swift la designación anual de la revista también generó especulaciones por parte de los conservadores de Make American Great Again, quienes sospechan que ella es parte de una estratagema electoral. «Taylor Swift tiene seguidores de culto que beberían Kool Aid (jugo en polvo) envenenado por ella. Los medios lo saben y lo están alimentando. Música, entretenimiento, deportes. Ahora la coronaron Persona del Año», escribió la cuenta de redes sociales @EndWokeness en una publicación en X (ex Twitter).
«¿El siguiente paso? Política. Si no crees que el régimen tiene planes de convertirla en un arma justo a tiempo para 2024, claramente no has estado prestando atención», decía el tuit.
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Laura Loomer, una figura de extrema derecha a quien el expresidente Donald Trump había querido contratar para trabajar en su campaña de 2024, se hizo eco de esos comentarios y dijo que «no es sorprendente ya que ella es con quien cuentan los demócratas para interferir en las elecciones presidenciales de 2024». «.
«¿Qué harían los demócratas sin su ídolo, que corre entre los hombres como agua y escupe tonterías anti-Trump cada vez que puede?» Loomer tuiteó. «Toda su gira mundial se ha convertido en una campaña de registro de votantes del Partido Demócrata».
Swift no ha intervenido en las próximas elecciones presidenciales, aunque respaldó a Joe Biden en 2020 y le dijo a la revista V en ese momento que él podría ayudar con el «proceso de curación» de la nación. También criticó el manejo de Trump de la pandemia de COVID-19 y dijo en 2020 que el «liderazgo ineficaz de Trump empeoró gravemente la crisis en la que nos encontramos y ahora la está aprovechando para subvertir y destruir nuestro derecho a votar y votar de forma segura».
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Aunque anteriormente se había mantenido al margen de la política, Swift ha hablado cada vez más al respecto desde que respaldó al exgobernador de Tennessee Phil Bredesen, un demócrata, en la carrera por el Senado contra la republicana Marsha Blackburn hace cinco años.
«En el pasado he sido reacia a expresar públicamente mis opiniones políticas, pero debido a varios eventos en mi vida y en el mundo en los últimos dos años, ahora lo siento muy diferente», dijo Swift en una publicación de Instagram de 2018. «Siempre he emitido y siempre emitiré mi voto en función de qué candidato protegerá y luchará por los derechos humanos que creo que todos merecemos en este país».
Blackburn ganó las elecciones por un margen inesperadamente amplio.
Las incursiones de Swift en la política, así como su relación con Kelce, han sido objeto de escrutinio conservador. A principios de este año, el comentarista de Fox News Tomi Lahren llamó a Swift y su novio una «pareja hecha en el cielo liberal».
Activistas conservadores como Charlie Kirk y Jack Posobiec culparon a Swift por las derrotas electorales del Partido Republicano en algunos estados este año, instando a los republicanos a idear un plan para contrarrestar el «ejército de votantes» de Swift.
El miércoles, Posobiec señaló que esta no era la primera vez que Swift era nombrada «Persona del año» por Time. «Swift ya fue nombrada co-Persona del Año en 2017 por su trabajo ayudando a lanzar el movimiento MeToo. Ha sido utilizada [como] una herramienta de gobierno durante años», escribió Posobiec en X. «2024 será el año para usarla al máximo».
Swift estuvo entre los cientos de mujeres que fueron reconocidas como la «Persona del año» en 2017. Conocido como Silence Breakers, el grupo estaba formado por rostros detrás del movimiento #MeToo que desencadenó una protesta nacional por el acoso sexual. Swift había ganado una demanda a principios de ese año contra un DJ de radio quien, según ella, la manoseó.
«Pensé que si es lo suficientemente descarado como para agredirme en estas circunstancias riesgosas y con mucho en juego, imagina lo que podría hacerle a un artista joven y vulnerable si tuviera la oportunidad», dijo Swift a Time en 2017.
Publicado en cooperación con Newsweek