Funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos anunciaron el cierre de ambos puentes internacionales en Del Río, Texas, el viernes por la noche.
Los cierres se producen a medida que aumenta la llegada de cientos de migrantes haitianos que se suman a los campamentos bajo uno de los puentes.
“Este cierre es necesario para que CBP responda a las necesidades urgentes de seguridad que presenta una afluencia de migrantes a Del Río y es efectivo de inmediato”, señala un comunicado. Añade que “promoverá y protegerá los intereses nacionales y ayudará a garantizar la seguridad de los empleados e instalaciones del público viajero, el tráfico comercial y el CBP”.
En tanto, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) está implementando inmediatamente una nueva estrategia integral para abordar el aumento de los encuentros con migrantes en el sector de Del Río del sur de Texas, señala en un documento la oficina.
Los seis componentes clave, indica, es que dentro de las próximas 24-48 horas, Aduanas y Protección Fronteriza habrán aumentado 400 agentes y oficiales en el sector de Del Río para mejorar el control de la zona. “Si se necesita personal adicional, se enviará más”.
El puerto de entrada de Del Río ha cerrado temporalmente, y el tráfico se está desviando de Del Río a Eagle Pass para gestionar los recursos de manera más efectiva y garantizar un flujo ininterrumpido de comercio y viajes.
En segundo lugar, la Patrulla Fronteriza (USBP) se está coordinando con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y el Servicio de Aduanas y la Guardia Costera trasladará a personas de Del Río a otros lugares de procesamiento, incluidos aproximadamente 2.000 que ya fueron trasladados este domingo, “con el fin de garantizar que los migrantes irregulares sean detenidos, procesados y expulsados rápidamente de los Estados Unidos de acuerdo con nuestras leyes y políticas”.
En tercer lugar, el DHS asegurará transporte adicional para acelerar el ritmo y aumentar la capacidad de traslado de vuelos a Haití y otros destinos del hemisferio en las próximas 72 horas.
En cuarto lugar, la Administración está trabajando con los países de origen y tránsito de la región para aceptar a personas que anteriormente residían en esos países, señala el DHS.
En quinto lugar, el DHS está llevando a cabo acciones humanitarias urgentes con otros socios federales, estatales y locales relevantes para reducir el hacinamiento y mejorar las condiciones de los migrantes en suelo estadounidense.
“El DHS ya ha tomado una serie de medidas para garantizar la seguridad de las personas a la espera del procesamiento, incluyendo tener a mano técnicos médicos de emergencia de la Patrulla Fronteriza y proporcionar agua, toallas e inodoros portátiles.
“Finalmente, la Casa Blanca ha ordenado a las agencias estadounidenses apropiadas que trabajen con los gobiernos haitianos y otros gobiernos regionales para proporcionar asistencia y apoyo a los repatriados”, indica.
El DHS está llevando a cabo vuelos regulares de expulsión a Haití, México, Ecuador y países del Triángulo Norte, “la Administración Biden ha reiterado que nuestras fronteras no están abiertas y que la gente no debe hacer el peligroso viaje”.
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek