El presidente de EEUU, Donald Trump, pidió la destitución del juez que ordenó frenar las deportaciones de 238 personas presuntamente vinculadas a la banda criminal venezolana El Tren de Aragua y a 23 de la «mara Salvatrucha». Pero el titular de la Corte Suprema le respondió y lo puso un freno al republicano.
El líder de la Casa Blanca recordó en su red Truth Social: «YO GANÉ POR MUCHAS RAZONES, CON UN MANDATO ABRUMADOR, PERO LUCHAR CONTRA LA INMIGRACIÓN ILEGAL PUDO HABER SIDO LA RAZÓN PRINCIPAL DE ESTA VICTORIA HISTÓRICA»
Por lo tanto, «solo estoy haciendo lo que los VOTANTES querían que hiciera. Este juez, al igual que muchos de los ‘jueces corruptos’ ante los que me veo obligado a comparecer, debería ser DESTITUIDO» en referencia al magistrado James Boasberg.
Boasberg había frenado de manera temporal las deportaciones de esos presuntos pandilleros a fin de analizar la medida y sus consecuencias, por lo que estableció que todo avión que hubiese salido con migrantes debía volver a suelo norteamericano.
Quien intervino fue el titular del máximo tribunal, John Roberts que le contestó de manera muy contundente al mandatario estadounidense.
«Durante más de dos siglos, ha quedado establecido que el juicio político no es una solución válida para el desacuerdo con una decisión judicial», recalcó
Y dejó en claro que «para eso existe el proceso normal de revisión de apelaciones».
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