El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, llegó este sábado a Hiroshima para participar en la cumbre del G7 que, según dijo, le permitirá «acercar la paz» a su país, y en sus primeras horas en tierras japonesas se reunió con varios de los líderes de las principales economías del mundo.
El mandatario arribó cerca de las 15:30 locales (3:30 de Argentina) en un avión cedido por Francia, un día después de conseguir que Estados Unidos abra la vía para autorizar la entrega de aviones caza F-16, uno de sus reclamos más fuertes de Kiev para avanzar con la contraofensiva y recuperar tierras ocupadas por Rusia.
La visita le brinda la oportunidad de reunirse con los dirigentes de las siete economías más industrializadas (Estados Unidos, Canadá, Japón, Francia, Reino Unido, Alemania e Italia), que apoyan financiera y militarmente a su país frente a la invasión que comenzó en febrero de 2022.
En sus primeras horas en Hiroshima, Zelenski mantuvo breves encuentros con los primeros ministros de Japón, Fumio Kishida; de Reino Unido, Rishi Sunak, y de Italia, Giorgia Meloni, consignó la agencia de noticias Europa Press.
Las tres reuniones tuvieron como tema común el desarrollo de la guerra en Ucrania y, en particular con Meloni y Sunak, el agradecimiento de Zelenski a los países europeos por su decisión de entrenar pilotos ucranianos en aviones de combate de cuarta generación, entre ellos los F-16, con vistas al posible envío a Kiev de estos aparatos.
También mantuvo un encuentro con el primer ministro de la India, Narendra Modi, en a primera cita cara a cara entre los dos líderes desde el inicio de la guerra. El presidente ucraniano se reunirá también con su homólogo estadounidense, Joe Biden, para hablar sobre «la aplicación práctica» de la decisión de la Casa Blanca sobre los aviones de combate F-16.
Zelenski multiplicó los encuentros con dirigentes extranjeros en los últimos días, en busca de apoyo militar para lanzar una contraofensiva en los territorios ocupados por Rusia.
Tras una gira por varios países europeos, ayer hizo escala en Arabia Saudita, para participar en una cumbre de la Liga Árabe, donde reprochó que «algunos» de los países allí representados «cierran los ojos» ante la invasión rusa de su país.