La vacuna de Pfizer-BioNTech contra el COVID-19 ha demostrado que reduce en un 94 por ciento los casos sintomáticos, de acuerdo con los resultados preliminares de un ensayo clínico a gran escala que se lleva a cabo en Israel durante la acelerada vacunación de sus 9,2 millones de habitantes.
La investigación está a cargo del Instituto de Investigación de Clalit, que es la mayor de las cuatro organizaciones de servicios de salud de Israel y que aplicó el estudio en sus afiliados, lo que llevó a comprobar la eficacia de la protección en 600,000 personas inmunizadas.
Por ahora esta investigación se presenta como una de las más extensas de las que se tienen noticias y fue la Universidad de Harvard la que tuvo a cargo la validación de los resultados preliminares, que confirman por primera vez la eficacia de la vacuna en un 92 por ciento en la prevención de los casos más graves de contagio.
Siete días después de la segunda dosis la vacuna Pfizer tuvo una efectividad de entre el 91por ciento y el 99 ciento, de acuerdo con el mismo estudio. Esta también es la primera vez que un estudio muestra la efectividad de la vacuna para proteger a los mayores de 70 años.
Las pruebas realizadas por Pfizer previo a la autorización sanitaria no fueron del todo concluyentes en ese tema derivado a que los participantes en esa edad fueron pocos.
El director de innovación de Clalit, Ran Balicer, dijo: “Demuestra inequívocamente que la vacuna contra el coronavirus de Pfizer es extremadamente eficaz en el mundo real una semana después de la segunda dosis, tal como se descubrió en el estudio clínico”.
También dijo al diario Haaretz que el estudio tuvo que “afrontar el reto de cotejar con nuevos medios y metodologías de control las diferencias entre los grupos de población vacunada y no vacunada, así como los cambios que presentaban durante el periodo de confinamiento (impuesto en Israel del 26 de diciembre al 7 de febrero)”.
Publicado en cooperación con Newsweek/ Published in collaboration with Newsweek