La primera dama, Melania Trump, condenó la violencia de la semana pasada en el Capitolio de Estados Unidos y pidió «sanación, gracia, comprensión y paz para nuestra gran nación».
En un comunicado emitido a través de la Casa Blanca, rindió homenaje a los fallecidos y dio su opinión sobre los hechos ocurridos en Washington, DC el 6 de enero: «Estoy decepcionada y desanimada con lo ocurrido la semana pasada».
La primera dama también descartó los «chismes lascivos» sobre ella después de los disturbios.
«Estoy decepcionada y desanimada con lo ocurrido la semana pasada», afirmó.
«Me parece vergonzoso que en torno a estos trágicos eventos haya habido chismes lascivos, ataques personales injustificados y acusaciones falsas y engañosas contra mí, de personas que buscan ser relevantes y tienen una agenda», dijo Trump.
«Esta vez se trata únicamente de sanar a nuestro país y sus ciudadanos. No debe utilizarse para beneficio personal».
En el camino a seguir, dijo: «Nuestra nación debe sanar de manera civilizada. No se equivoquen al respecto, condeno absolutamente la violencia que ha ocurrido en el Capitolio de nuestra nación. La violencia nunca es aceptable».
Continuó describiendo la pasión de la gente por participar en las elecciones como «inspiradora», aunque dijo que esa pasión no debería convertirse en violencia.
«No se equivoquen al respecto, condeno absolutamente la violencia que ha ocurrido en el Capitolio de nuestra nación. La violencia nunca es aceptable», exclamó la primera dama.
«Es inspirador ver que tantos han encontrado pasión y entusiasmo al participar en una elección, pero no debemos permitir que esa pasión se convierta en violencia», dijo. «Nuestro camino a seguir es unirnos, encontrar nuestros puntos en común y ser las personas amables y fuertes que sé que somos».
En una despedida comentando que su tiempo como primera dama está llegando a su fin, Trump agregó: «Ha sido el honor de mi vida servir como su Primera Dama. Quiero agradecer a los millones de estadounidenses que nos apoyaron a mi esposo y a mí. durante los últimos cuatro años y mostró el increíble impacto del espíritu estadounidense. Estoy agradecido con todos ustedes por permitirme servirles en plataformas que son muy queridas para mí «.
Los comentarios de la primera dama vienen con una reacción sostenida contra su esposo y sus aliados luego de las escenas en Washington, D.C. Los legisladores continúan presionando por su destitución, con pedidos para que se invoque su juicio político o la Enmienda 25 para expulsarlo del poder.
El presidente ha calificado el ataque al Capitolio de «atroz», y agregó en un comunicado: «Como todos los estadounidenses, estoy indignado por la violencia, la anarquía y el caos».
Dijo que los involucrados «profanaron la sede de la democracia estadounidense» y agregó: «A los que participaron en los actos de violencia y destrucción, ustedes no representan a nuestro país. Y a los que violaron la ley, les pagarán».
PUBLICADO EN COLABORACIÓN CON NEWSWEEK. PUBLISHED IN COLLABORATION WITH NEWSWEEK.
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