Aunque el ecoturismo comenzó a desarrollarse en la década de los 90, cada vez más personas buscan opciones que reduzcan el impacto ecológico en los diferentes destinos turísticos que visitan. En los últimos años, en el mundo de la hospitalidad explotó la tendencia de sostenibilidad: la mayoría de los hoteles alrededor del mundo apuestan a un turismo responsable con un fuerte compromiso de proteger el planeta.
El turismo responsable se volvió protagonista después de la pandemia y el afán por vacacionar en la naturaleza es tendencia mundial y, sin dudas, en Argentina también crece el interés por esta forma de viajar.
Según el informe sobre “Turismo sustentable 2021” realizado por la plataforma Booking, a raíz de la pandemia como un punto de inflexión para la industria y los viajeros, el 71% de los argentinos quiere viajar de forma más sustentable en el futuro. Este nuevo estudio que ofrece información recopilada sobre la opinión de más de 29.000 personas de 30 países distintos concluye que un 63% admite que la pandemia provocó un cambio de actitud que los llevó a implementar modificaciones positivas en el día a día, por ejemplo, un 46% empezó a reciclar.
Asimismo, estos compromisos diarios para vivir de forma más sustentable se condicen con las intenciones de la comunidad viajera para sus aventuras futuras. Por un lado, un 90% de los argentinos quiere reducir los residuos en general; y por el otro, un 87% quiere reducir el consumo de energía (por ejemplo, apagando el aire acondicionado y las luces cuando no están en una habitación). Hasta un 85% quiere usar medios de transporte más ecológicos como caminar, andar en bicicleta o usar transporte público en vez de taxis o autos alquilados.
Pero no todo sucede post pandemia. A principios de la década de los 90, Suecia y Noruega fueron precursores al introducir los primeros planes de sustentabilidad en algunos hoteles nórdicos. En ese entonces comenzó a resonar un nuevo término que iba en la búsqueda de un equilibrio “eco-friendly”, con el único fin de ayudar a prevenir o mitigar los impactos ambientales.
“Para que los hoteles sean sustentables deben cumplir con una política de cuidado ambiental real. Es fundamental implementar una serie de medidas que van mucho más allá que solo separar residuos. El foco está puesto en reducir lo máximo posible la huella ecológica de los turistas”, explica Karina Perticone, directora ejecutiva de Visit Buenos Aires, organización que busca la promoción turística internacional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Si bien el “green washing”, aquellas acciones de sustentabilidad por parte de empresas como lavado de imagen verde, sigue creciendo en todo el mundo, también puede resultar una falsa estrategia de cuidado medioambiental mientras no existan normas que aclaren quién hace qué exactamente. No obstante, ese maquillaje como estrategia de comunicación es difícil de sostener dentro del mundo del hospedaje. Para no quedarse en falsas promesas e inclinar la balanza hacia la sustentabilidad, Perticone explica que un “hotel verde” no solo tiene que tener iniciativas sobre el uso eficiente de los recursos naturales como el agua o utilización de productos de limpieza biodegradables, o hasta la eliminación de plásticos de un solo uso, sino que debe cumplir con promesas más profundas como “desarrollar programas educativos para motivar a los empleados y huéspedes a cuidar el mundo, y brindar la posibilidad de inclusión a las comunidades locales”.
Y eso que sólo estamos hablando de modificar algunos hábitos, sin tener en cuenta los trabajos estructurales que se deben implementar en los alojamientos. Obviamente que uno de los pilares de la sustentabilidad radica en una arquitectura “verde” basada en el entorno natural, desde el uso de materiales nobles como diseñar espacios para optimizar la luz natural para el ahorro energético o hasta priorizar ventanas con doble vidrio para mantener tanto el frío como el calor.
Después de más de dos décadas desde el inicio de una cultura de hospedaje más ecológica, queda claro que el turismo sostenible ya no es una moda sino un cambio de paradigma. “Es cosa de todos los días y que todo el sector debe entender y aplicar. Su éxito exige que las comunidades históricamente marginadas participen del proceso”, afirma la ejecutiva de Visit Argentina. Y agrega que en la actualidad la elección turística orientada hacia la naturaleza constituye “un segmento estratégico en el país”. Si bien muchos hoteles del mundo comienzan a tomar conciencia y se suman a esta ola de lucha contra el cambio climático, algunos de los esfuerzos del sector siguen siendo insuficientes para eliminar las emisiones de carbono. Sin embargo, los inversores también prestan cada vez más atención al historial de la huella de carbono de una propiedad para alcanzar la distinción de hotel ecolíderes.
ESTADÍAS ECOLÓGICAS
Según la ONU, la industria hotelera es responsable del 1% de las emisiones globales. Además, la organización asegura que ese porcentaje podría aumentar si no crece la demanda de alojamientos sustentables.
En Argentina, Pristine Camps en las Salinas Grandes jujeñas tomó nota para aportar su granito de arena. El proyecto de este campamento de lujo compuesto por cuatro domos nació con la intención de no generar ningún tipo de alteración sobre el fantástico escenario de esta reserva natural. Está construido sobre plataformas elevadas de madera, que evitan la erosión del suelo y respetan el rumbo de la geografía, y todos materiales utilizados en el emprendimiento vienen certificados de deforestación, con estándares y exigencias de sustentabilidad por parte de los proveedores. También se puede premiar la promesa cumplida respecto a su 100% abastecimiento por energías renovables, algo aún no tan frecuente a nivel nacional. En su concepto de sustentabilidad integral suman una política de residuos plásticos cero, y el impacto es mínimo al tener el hotel una capacidad para diez personas. Además, con los residuos orgánicos se hace compost que utilizan en la huerta de la comunidad.
Si cruzamos fronteras no podemos dejar de mencionar el hotel más ecológico del mundo. Enclavado en una zona hasta hora virgen del Ártico, el hotel Svart promete abrir sus puertas antes de que finalice este 2022. Se trata del primer hospedaje con pura energía positiva del planeta: su diseño permite que produzca más energía de la que utiliza y aproximadamente un 85% menos que cualquier hotel convencional. Durante su presentación, los arquitectos del estudio Snøhetta sorprendieron con su diseño circular sobre pilotes y en la cima de un fiordo noruego, lo que permite disfrutar de vistas 360º y por qué no sorprenderse con el último resplandor de una aurora boreal.
La sostenibilidad se ha convertido en una obligación. Lo dicen los datos, y lo confirman las búsquedas de viajeros que buscan cada vez más hoteles ecológicos.
HOTELES MÁS VERDES
Por Roberto Amengual – Presidente de la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina (AHT, que reúne hoteles 4 y 5 estrellas)
El ecoturismo se inició hace décadas atrás y Argentina, a base de años de trabajo, paulatinamente se consolida como un destino para este segmento, al mismo tiempo que los argentinos empiezan a considerarlo entre sus alternativas de viaje. La posibilidad de explorar ambientes naturales, conociendo comunidades locales, generando un impacto económico y social positivo, buscando reducir al máximo el impacto ambiental se posiciona cada vez más arriba dentro de las opciones a la hora de organizar un viaje.
Argentina posee muchas opciones en este segmento turístico, no sólo a través de sus parques nacionales y cordones montañosos sino también con una de las siete maravillas del mundo natural: las cataratas del Iguazú.
Percibiendo esta tendencia, hace ya más de una década, desde la Asociación de Hoteles de Turismo se trabajó con una consultora española especializada para desarrollar el programa “Hoteles Más Verdes”. Con tres niveles escalonados que permiten un avance progresivo en la incursión de la sustentabilidad, acompañado de asesores para la transformación cultural de las organizaciones, este programa se consolidó como la mayor certificación en sustentabilidad de Argentina, con más de 200 hoteles inscriptos a nivel nacional.
Recientemente “Hoteles Más Verdes” fue avalado por buscadores internacionales como Booking y Despegar, entre otras plataformas. De este modo, cuando un hotel posee dicha certificación, aparecerá cuando el usuario aplique el filtro de “hoteles sustentables”. Este reconocimiento ha incrementado el interés en el programa, además de trabajar en convenios con los distintos gobiernos que ayudan a impulsarlo.
Este esfuerzo encuentra sentido en sus consecuencias positivas. Gracias a las alternativas sustentables, los viajeros logran reducir las emisiones de carbono que su viaje genera. Para muchos, este factor es tan importante que buscan compensar la totalidad de su huella de carbono contratando organizaciones especializadas en reducirlas. De este modo, se convierten en carbono neutro y su viaje no tiene impacto ambiental.
A medida que las nuevas generaciones tengan más consideración por estos factores, mayor transformación deberá hacer la oferta turística para captar esos mercados.