El 77% de los infieles admite que usar tapabocas los beneficia a la hora de tener encuentros extramatrimoniales. Al 34% le gustaría que su uso continúe una vez terminada la pandemia, según la última encuesta de Gleeden, plataforma líder de encuentros extraconyugales pensada por y para mujeres.
El aislamiento social, preventivo y obligatorio hizo que la vida de los argentinos cambie por completo. Generó nuevas costumbres -como el saludo con el codo-, e impuso normas como el infaltable tapabocas en espacios abiertos y cerrados. Sin dudas, en estos 9 meses de confinamiento, los infieles argentinos tuvieron que rebuscarse. Y en ese desafío, descubrieron el beneficio de tener la cara cubierta.
La ciencia lo dice: además de proteger de COVID-19, el tapabocas es ideal si se quiere salir sin ser reconocidos. Según un estudio publicado en julio 2020 por el Centro de Investigación de la Visión de la Universidad de York (Toronto) en el New York Times, los barbijos no sólo dificultan enormemente la capacidad de reconocer rostros sino que además, muchas veces, hace que sea imposible de identificarlos.
La investigación, entre muchas otras cuestiones, también afirma que el uso de tapabocas confunde incluso a quienes pueden reconocer rostros con facilidad. Y esto, sin dudas, es perfecto para facilitar los encuentros con total discreción.
El trabajo realizado por Gleeden, entre 3.355 usuarios de Argentina, Colombia y México, afirma que mientras algunas personas se oponen al uso de tapabocas y alegan que su uso atenta contra la libertad personal, otras admiten que no sólo se sienten más seguras utilizándolo sino que además es de utilidad a la hora de tener encuentros con su amante. El 72% de los encuestados admite que el uso de tapabocas es ideal para encontrarse con su amante de manera discreta teniendo la oportunidad de poder moverse de forma discreta o, en otras palabras, de incógnito.
Gracias al uso del barbijo, el 57% cree que ahora es más fácil encontrarse con su amante en un lugar público. El 51% incluso se atrevería a tener un encuentro cerca de su lugar de trabajo y el 32% cerca de su casa. No es sorpresa que a los infieles les parezca fabulosa esta normativa, de hecho ¡el 34% de los encuestados admite que le gustaría que la obligación de usar tapabocas se extienda un año más!
