Por Darío Lopérfido
La crónica del juicio a los terroristas que cometieron los atentados de Paris en 2015 en los que murieron 130 personas y hubo más de 350 heridos, está reflejada magistralmente en el libro V13 escrito por Emmanuel Carrère. Una oportunidad para entender qué pasa en la cabeza de una persona capaz de cometer semejante atrocidad.
Emmanuel Carrère es un gran escritor que navega entre las aguas de la literatura y el periodismo. Alguna vez dijo que su predilección por escribir historias reales tenía que ver con que muchas veces la realidad supera la ficción. Uno debe darle toda la razón cuando se topa con historias como la de Jean Claude Romand, que asesinó a toda su familia (a su esposa, a sus dos hijos y a sus padres).
Romand había dicho siempre que era médico y que trabajaba en la Organización Mundial de la Salud. Era todo mentira y ni siquiera era médico. Cuando ese mundo falso que había construido empezó a desmoronarse, asesinó a toda su familia. Carrère hizo una crónica extraordinaria del suceso en un libro fantástico llamado “El adversario”. Por esa historia fue que Carrère dijo que sucesos como esos pueden parecer poco creíbles si se plantean como proyectos de ficción y, sin embargo, suceden en la vida real.
«V13», el último libro de Emmanuel Carrère
Su último libro se llama «V13» y es la cobertura del juicio que se hizo a un grupo de jóvenes terroristas por los atentados de Paris en 2015 en los que murieron 130 personas y hubo más de 350 heridos en atentados simultáneos en distintos lugares de Paris. Carrère asistió a todas las sesiones del juicio y fue escribiendo crónicas para una revista francesa llamada L’Obs. Terminado el mismo, emprendió el trabajo de convertir esa cobertura en un libro que es muy bueno y que toca todas las circunstancias que pueden aparecer en un juicio como ese en donde se ventilaron cosas muy dolorosas.
El dolor permanente de los familiares de las víctimas que se veía aumentado por el aporte de testigos que pudieron salvarse y dieron información acerca del infierno que se había vivido en esos lugares. Tambien los traumas de la gente que sobrevivió y presenció escenas dantescas generadas por un grupo de locos que entraban a los lugares gritando “Ala es grande” y disparaban contra todos los que estaban en el lugar hasta que, terminada la tarea, activaban las bombas que llevaban en un cinturón y se suicidaban.
Es muy impactante el libro para intentar ahondar en dramas familiares, en el rol de la Justicia y en intentar descifrar las ideas de los jóvenes terroristas. Sobre estos últimos hay aspectos que son llamativos.
La mayoría de los jóvenes que se incorporaron a la organización Ejercito Islámico y participaron del atentado provenían de países de Europa (en especial Francia y Bélgica). Vivian allí desde siempre ya que los inmigrantes que habían abandonado sus países para mudarse a Europa fueron sus padres que no tienen nada que ver con el terrorismo y que habían formado sus familias trabajando en esas sociedades. Chicos de clase media y media baja que habían podido estudiar y vivir en sociedades prosperas. No tenían nada que ver con la imagen de terroristas entrenados. Eran más bien jóvenes de pocas luces que provenían de barrios donde la mayoría son inmigrantes y que terminan siendo cooptados por organizaciones que les ofrecen cierto sentido de pertenencia si trabajan asesinando personas.
El suicidio, luego de los asesinatos, lo procesan por promesas de premios futuros que recibirán después de muertos. Es fascinante meterse en esas historias que Carrère describe con precisión y emoción. Jóvenes de pocas luces, criados en sociedades europeas e hijos de trabajadores que se convierten en asesinos implacables por quedar bien con un amigo o por sentir que alguien los hace sentir parte de algo.
Es aterrador pensar que la seguridad de muchas personas está en manos de estos chicos que pasan de trabajar en un bar o de ir al colegio a convertirse en asesinos implacables matando a personas que solo querían pasar un buen rato un viernes a la noche. ¿Qué hay en la cabeza de esos jóvenes? La banalidad del mal.
Muy importante es el nuevo libro de Carrère para entender la locura en la que una parte del mundo está inmersa y el uso y la manipulación que se hace de algunas religiones para convertirlas en un instrumento de muerte.
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El Podcast de Newsweek Argentina, por Darío Lopérfido: «Cuando la realidad supera a la ficción»
