Por Belén Arce (*)
La inteligencia artificial (IA) se posiciona como un pilar esencial para abordar los desafíos ambientales y promover la sostenibilidad empresarial.
El rápido crecimiento del mercado de GenAI, proyectado en $98.100 millones para 2026 con una tasa de crecimiento anual compuesta del 32%, subraya su importancia. Además, el impacto ambiental de la IA, especialmente en el entrenamiento de grandes modelos como GPT-3, resalta la necesidad de estrategias sostenibles en todas las etapas del proceso.
La adopción de la IA generativa es generalizada, con un 86% de los CEO involucrados y un 97% anticipando su transformación empresarial. La eficiencia energética y la mitigación del impacto ambiental son áreas clave de enfoque, con estrategias como la optimización del hardware, la adquisición de energía renovable y la implementación de prácticas de inferencia sostenible.
La relación entre la IA y la sostenibilidad se basa en su potencial para catalizar la innovación responsable. El uso adecuado de la IA generativa puede impulsar la eficiencia empresarial al tiempo que reduce el impacto ambiental, creando un equilibrio crucial entre la tecnología y la responsabilidad ambiental. Adoptar prácticas sostenibles en todas las etapas del ciclo de vida de la IA es fundamental para asegurar que su desarrollo y aplicación sean éticos y beneficiosos tanto para las empresas como para el medio ambiente.
Belén Arce
La GenAI también presenta oportunidades para la generación de valor empresarial, desde acelerar el diseño de productos hasta optimizar los embalajes y superar sesgos inconscientes en los algoritmos.
Sin embargo, la transición de la fuerza laboral y la colaboración responsable son desafíos importantes que deben abordarse para garantizar una implementación ética y equitativa de la IA.
(*) Especialista en sustentabilidad y comunicación
