Por Lalo Zanoni
Durante los últimos días de febrero y los primeros de marzo tuvo lugar en Barcelona el Mobile World Congress, uno de los eventos más importantes de la industria tecno mundial. Post pandemia, “el Mobile” volvió con todo su esplendor.
Lo inauguraron el rey Felipe VI y y el presidente Pedro Sánchez y el predio Fira Gran Vía recibió a casi 90.000 personas para ver las principales novedades de las mejores marcas y, fundamentalmente, cerrar acuerdos de negocios.
¿QUÉ HAY DE NUEVO?
Las estrellas fueron los celulares plegables. De la mano de Samsung y sus Galaxy Z Fold y Flip, esta tendencia crece de a poco pero firme y Motorola presentó su prototipo enrollable de pantalla OLED flexible (o pOLED) que pasa de 4 a 6,5 pulgadas. Todavía sin fecha de salida ni precio.
China empieza a sacar al mundo sus dispositivos plegables, hasta el momento solo destinados a consumo interno. Sorprendió Oppo con el Find N2 Flip que tiene una pantalla exterior de 3,26 pulgadas, la más grande de los de su categoría. Y una cámara de 50MP Hasselblad para sacar fotos casi de forma profesional. Ya se vende en el mercado europeo a 1500 euros.
Otra marca china, Honor, presentó su plegable Magic VS de 6,1 mm en su modo desplegado, también con una gran cámara. La versión de 12 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento cuesta 1600 euros.
Casi 90.000 personas participaron del Mobile World Congress 2023, en Barcelona (Reuters)
La desconocida empresa Tecno, que pisa fuerte en África, mostró el Phantom V Fold, que fue la estrella que siempre hay en este tipo de ferias. Se pliega tipo libro de 6,4 pulgadas (una mini tablet) y tiene una batería enorme que promete varios días de duración. Se vende a 1200 dólares en India, su principal mercado.
OnePlus anunció su primer plegable para finales de este año.
Aunque no es un celular, vale igual. La también china Lenovo mostró un prototipo de notebook enrollable con pantalla OLED que permite estirar la pantalla o encogerla según se necesite. Con un botoncito, el panel pasa de 12,7 a 15,3 pulgadas en 20 segundos y cuando se achica el LED se esconde debajo del teclado.
La empresa emblema china Huawei quiso mostrar su poder con el stand más grande de la Feria. El mensaje, desde el corazón de Europa, fue contundente hacia los EE.UU., país que le declaró la guerra con un bloqueo comercial. Se hace fuerte en nube (cloud) y en ciberseguridad, nada menos. En cuanto a producto, presentó el Watch Buds, un reloj inteligente digno de James Bond. Tiene una gran carcaza que al levantarla, muestra dos auriculares bluetooth escondidos. Aplausos para el buen diseño.
Pero hace años que el Mobile ya dejó de ser solo un evento para mostrar novedades en torno a los celulares y se transformó en un encuentro político. En los cuatro días que duró el evento se discutió sobre temas troncales para el futuro de las sociedades. Gobiernos y empresas de todo el mundo debaten y negocian acuerdos en torno a la inteligencia artificial (IA), ciberseguridad, Big Data, geolocalización, el metaverso, 5G y el futuro 6G, e Internet de las Cosas (IoT), entre otros.
Este año la vedette de la feria fue la IA, de la mano de la explosión de ChatGPTT, y el metaverso, a pesar de que todavía no termina de despegar. También se habló mucho de la tecnología de conexión 6G, todavía en fase de promesa. Se espera que se empiece a comercializar recién en 2030. Una eternidad en un mundo que cambia cada semana pero, ya se sabe, el que se duerme, se queda relegado en la carrera de esa industria poderosa que llaman futuro.
