Por Lalo Zanoni
Cada día, miles de trabajadores en todo el mundo suman nuevas herramientas de inteligencia artificial a su jornada laboral, y el resultado es contundente: consiguen trabajar una hora menos, en promedio. Así lo revela la encuesta “2024 Global Workforce of the Future”, del Grupo Adecco, que analiza el impacto de la IA en el trabajo diario. Pero, como siempre, mientras la tecnología promete un ahorro de tiempo, también trae dudas y desafíos que generan resistencia, en un contexto laboral cada vez más incierto.
La IA permite reducir las horas dedicadas a tareas rutinarias y repetitivas, liberando a los empleados para que puedan concentrarse en aspectos más estratégicos o creativos. Esto significa, por ejemplo, y según el mismo estudio, que sectores como energía y tecnologías limpias registran un ahorro de hasta 75 minutos por día, mientras que en la industria aeroespacial el beneficio es de 52 minutos. Sin embargo, este aumento de eficiencia no se traduce en un bienestar general: cerca del 40% de los empleados manifiesta preocupación por su estabilidad laboral, y un 13% ya perdió su empleo debido a la automatización.
El desafío de regular la inteligencia artificial: 7 razones para tenerla bajo control
Los datos muestran una relación ambivalente con la IA. Por un lado, un 51% de los trabajadores considera que esta tecnología amplía sus oportunidades laborales, y un 46% afirma que les ha brindado la posibilidad de aprender y desarrollarse. Sin embargo, apenas una cuarta parte completó su formación en IA, lo que sugiere que una mayor capacitación podría mejorar la percepción de esta tecnología. En el fondo, la IA parece depender más de una estrategia humana que de la pura eficiencia. Denis Machuel, CEO de Adecco, recomienda una visión centrada en las personas, en la que la IA sea una herramienta para mejorar la empleabilidad a largo plazo, en lugar de ver su uso como una solución inmediata para reducir costos laborales.
Uno de los desafíos que la IA expone en el mundo laboral actual es el de la adaptabilidad. Solo el 11% de los empleados cree sentirse preparado para el futuro. La mayoría de ellos cuenta con planes de desarrollo personalizados y recibe capacitación en liderazgo, una muestra de que la preparación y el aprendizaje constante serán los factores decisivos en un mundo laboral en rápida transformación.
La encuesta de Adecco también advierte sobre la necesidad de una mayor movilidad interna. Un 76% de los empleados cree que las empresas deben priorizar la formación de sus propios trabajadores para ocupar otros roles. Sin embargo, solo el 9% planea permanecer en su actual empleo para realizar un cambio interno, marcando un claro descenso respecto al año pasado. Las empresas parecen perder el compromiso de sus empleados, quienes desean opciones de crecimiento más visibles y accesibles dentro de la misma organización.
El desafío de regular la inteligencia artificial: 7 razones para tenerla bajo control
El bienestar y la salud mental completan este escenario de cambios acelerados. Mientras la IA reconfigura el mercado laboral, el 40% de los trabajadores se siente abrumado por la carga de trabajo, y el 62% teme que la IA termine favoreciendo a unos pocos y marginando al resto.
En resumen, la IA es tanto una herramienta como una paradoja en el mundo laboral. Por un lado, promete y facilita el trabajo diario; por otro, introduce una presión que afecta la percepción de futuro y seguridad en los empleados.
