Guillermo Oliveto, especialista en consumo, analizó la situación económica de los argentinos e indicó que lo primero «es distinguir dos cosas: por un lado, el bolsillo y por el otro, la tolerancia de la sociedad y el apoyo al Gobierno».
En diálogo con Jonatan Viale en Radio Rivadavia hizo hincapié en que «hoy la gente está estóica resistiendo una recesión de una magnitud 2002 hasta acá» y precisó: «Primer semestre, cerrado ya a esta altura, magnitud 2002».
A modo de ejemplo, señaló que «hay categorías de alimentos que caen 25%, 30%».»Esto no se ve desde el 2002 y es casi un milagro que, en ese contexto, el presidente (Milei) sostenga 50 puntos de aprobación», resaltó.
Ante esto, el conductor le preguntó: «¿Por qué la gente le sigue dando una oportunidad al Gobierno? y el entrevistado respondió: «Por muchas cosas, primero porque rompió el pacto que tenía con la lógica anterior en la oscuridad de la pandemia donde presintió que el Estado ya se había metido en cuestiones que no eran de carácter económico si no de orden moral y ahí hubo un quiebre».
«Desde ahí esto crece y Milei lo termina interpretando en un formato punk, en un formato rompan todo«, recalcó.
Y aquí fue claro: «La clase media de los 80′ quería comprarse la casa, la del 2001- 2002, post crisis, quería viajar y la del 2024 quiere llenar la heladera».
Contó que al hablar con la gente, nos decía: «Antes estuvimos bien», entonces nosotros le preguntamos: «¿Cuándo es antes? y puntualizó: «Durante mucho tiempo apareció Néstor Kirchner, que fue una economía creciendo al 9%, promedio anual más una caída del desempleo violento del 27% al 5%. Y el consumo, en el 2013, volando».
«Milei rescata a Menem, dicen ‘terminó mal’ pero lo rescatan», agregó.
Y subrayó: «Al preguntarle a los menores de 30 años, contestan que ‘nunca estuvimos bien'». Aquí sumó que «los jóvenes tienen más capacidad para resistir en el desierto (ajuste) mientras que los más grandes te van a decir tiráme un vaso de agua o mostráme el primer oasis porque no llegó».
Para concluir, sobre el estado de ánimo, señaló: «Tenemos recesión con ilusión«, es decir, «estamos mal pero sentimos que hay un imaginario de futuro», pero eso «en junio se empezó a cruzar con una fragilidad con ansiedad» y afirmó que «esas dos vibraciones hoy están tocando el sistema».
Argentina perdió más de 142.000 de empleos formales: cuáles son los sectores más afectados