El diputado nacional, Nicolás Massot, habló sobre la situación en el Congreso y sostuvo: «Yo la veo bien porque lo primero que hay que desdramatizar esta idea de que si el gobierno no obtiene la sanción express de lo que mandó al Congreso sin una sola modificación es un fracaso».
En diálogo con Wily Kohan en Radio Rivadavia, explicó: «Eso es algo nuevo, esta idea de que la discidencia es por un interés espurio, porque alguien busca una coima» por lo que aseveró que «es un disparate lo que se ha generado en estas últimas semanas».
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«Además nos genera a nosotros, que con errores y aciertos, estamos todos del lado de la iniciativa privada, de la incersión de la Argentina en el mundo, es decir, el espirítu del rumbo que marca el gobierno, tanto en el DNU como en la ley, yo quiero que haya tranquilidad de que está garantizado», expresó.
En cuanto a las críticas, consideró que «el gobierno debería, más adelante, especificar a qué se refiere taxativamente cuando habla de necesidad y urgencia» e hizo hincapié en que «para que un DNU sea válido tiene que tener la aprobación de ambas cámaras, no de una sola».
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«Una de las cuestiones que me impidió avanzar en un apoyo total fue una de las tantas delegaciones extraordinarias que pide el gobierno en un punto muy sensible que son los procesos de privatizaciones», indicó y aclaró: «Yo estoy de acuerdo con que el déficit de las empresas públicas hay que bajarlo y que una de las maneras de hacerlo es privatizar un gran número de esas empresas».
«La discusión es en el cómo», marcó y puso el foco en que «este gobierno, mucho más que el gobierno de Macri del que yo fui parte, tiene una cantidad de solapamientos entre lo público y lo privado, de conflictos de interés entre funcionarios, empezando por el propio presidente con grupos de interés a los cuales están o estuvieron vinculados hace no mucho».
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«Frente a esa realidad, y teniendo en cuenta que Argentina tiene una economía relativamente chica en términos de los grupos económicos que pueden pretender participar en los procesos de privatización de esta cuarentena de empresas, que además de todo eso, que el gobierno pida una delegación plenipotenciaria para que las privatizaciones eviten el Congreso, a mí me parece alarmante e innecesario», argumentó.
«También creo que si queremos tener un proceso de privatizaciones exitoso tenemos que darle una robustez institucional, una fortaleza institucional, para que las compañías paguen lo que las empresas valen, para que entren en esas operaciones con seguridad jurídica», detalló y agregó: «Desde este punto de vista, sería una torpeza evitar el Congreso».
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Al ser consultado sobre «si como espacio político van a buscar tirar abajo el DNU», el legislador fue claro y manifestó: «No, no nosotros no vamos a mover los hilos para tirar abajo el DNU». «De hecho de los 16 capítulos que tiene el DNU, hay 12 con los que estamos en total conformidad».
«Y los tres o cuatro capítulos con los que compartimos el espíritu y el fondo, pero no compartimos algunas de las cuestiones que dicen esos artículos, le dijimos al gobierno, mandénlos por ley, habiliten el tratamiento parlamentario y eso va a hacer que el DNU deje de ser tan conflictivo al menos en el fondo», añadió y marcó: «Es lo que el gobierno ha hecho».
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