Mientras la Justicia continúa con la investigación por el intento de magnicidio de la vicepresidenta Cristina Kirchner, el diputado José Luis Espert, y la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, apuntaron contra el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández.
Ambos manifestaron su preocupación en torno a la seguridad de la funcionaria, quien estuvo cerca de recibir un disparo en la puerta de su departamento en Recoleta, y aseguraron que hay responsabilidad de parte del titular de la cartera.
“Con el derecho que me dan los 45 años de lucha ininterrumpida luchando por defender a la gente que amo, por inepto y descuidado, exijo la renuncia de Aníbal Fernández”, escribió la activista de Derechos Humanos.
En el descargo que publicó en la cuenta de Twitter de la entidad, Hebe de Bonfini auguró que “muchos me acompañen” en su pedido contra el ministro de Seguridad, debido a que “no supo cuidar a la presidenta”.
Con el derecho que me dan los 45 años de lucha ininterrumpida luchando por defender a la gente que amo, por inepto y descuidado, exijo la renuncia de Aníbal Fernández.
Y ojalá muchos me acompañen para lo mismo, porque no supo cuidar a la presidenta.
Hebe de Bonafini
— Prensa Madres (@PrensaMadres) September 2, 2022
Por su parte, José Luis Espert pasó por el programa “Baby en el Medio”, que se emite por Radio Rivdavia, en donde expresó su repudio por el atentado contra Cristina Kirchner: “Me parece lamentable y aberrante el intento de asesinato a la vicepresidenta”.
El diputado liberal remarcó que hay que poner el foco en si el agresor, que se encuentra detenido, “es un loco suelto o hay un autor intelectual”. Y advirtió que bubo “una falla total en la seguridad” alrededor de la funcionaria.
En ese sentido, fue crítico contra el ministro y pidió su renuncia: “Hoy tendría que haber rodado la cabeza de Aníbal Fernández, en un país civilizado ocurre eso”.
Los reclamos contra el titular de la cartera de Seguridad se dan luego de varios días de debate entre Nación y la Ciudad de Buenos Aires sobre quién debe tener el control de la seguridad en las inmediaciones del domicilio de la expresidenta en Recoleta.
Mientras el Gobierno porteño afirmó que es de su competencia por ser su territorio, luego del enfrentamiento del sábado pasado entre la Policía de la Ciudad y los militantes el juez Roberto Gallardo pidió que cesen el operativo para que pase a manos de las fuerzas federales, ya que se trata de la custodia de la segunda persona con mayor jerarquía en el país.