La reciente carta abierta de Cristina Kirchner anunciando que acepta su candidatura para presidir el Partido Justicialista dejó muchas preguntas sobre cuál es el contexto y por qué decide asumir el desafío “sin miedo ni presiones” como afirmó en el escrito donde confirmó la noticia.
Carta abierta a los compañeros y compañeras peronistas, y a los argentinos que nunca lo fueron, también.https://t.co/yoh8fuOt6m pic.twitter.com/h8StzEGYIE
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) October 7, 2024
Aunque Cristina es una dirigente que tiene una imagen muy consolidada, algunas encuestas vienen mostrando que muy de a poco esa imagen positiva está cayendo pero además de medirla en el escenario nacional, en pleno auge de la interna, miden su imagen dentro del peronismo ¿Qué dicen los números?
“Baja de a poquito, pero baja la imagen de Cristina. El peronismo no kirchnerista en muchas encuestas está arriba del peronismo kirchnerista. No es que esté muy lejos el no kirchnerista, pero está arriba, y por eso Cristina decide hacer algo fuerte: atacar ahora” explica el analista político Hernán Madera. Tras la sanción de la Boleta Única de Papel, a la que se oponía el peronismo, Cristina mira a la provincia de Buenos Aires de cara a las legislativas.
Un informe reciente de la consultora Reyes-Filadoro que llegó a Casa Rosada muestra a Cristina con una imagen positiva del 49% en el conurbano bonaerense, para imagen negativa tiene el mismo número.
Más allá de que la baja no sea significativa en número si deja interrogantes respecto a su lugar y su capacidad de liderazgo en este contexto político. Mauricio Macri, Cristina Kirchner, y ahora Javier Milei, tienen consolidado un piso de rechazo y un piso de adhesión. La pregunta es si sacando el factor novedoso (refiriendo a Milei como tal), Macri o Cristina pueden mover votantes por encima de este techo que marcan muchas encuestas.
Al respecto los consultores dicen que será muy difícil que haya movimientos bruscos en ese piso (o techo),concretamente que personas que tienen imagen negativa de un dirigente cambien después a una imagen positiva. El analista Lucas Raffo explica que es muy difícil porque es una expresidenta, una dirigente que ya es conocida por el electorado y que ha formado a lo largo de estos años esa determinada imagen.
En este sentido, ahora se plantea si habrá internas dentro del espacio o si directamente le van a ceder el lugar a CFK. Siguiendo este punto y los datos de las consultoras que plantean al peronismo no kirchnerista como pujante dentro del espacio: los peronistas saben que si quieren encontrar un nuevo liderazgo y renovarse, habrá enfrentamiento. Dentro del peronismo, genuinamente se preguntan si las dos veces presidenta podrá retomar la épica de sus mejores años y mostrarse competitiva para lo que se viene tras el fracaso del Gobierno Fernández-Fernández.
Dentro del peronismo, todo se sintetiza en estas preguntas: ¿Por qué debería ser distinto? ¿Por qué deberían volver a Cristina?
Para Raffo la respuesta es que se fortalece un núcleo duro, que le puede garantizar con una estrategia muy defensiva, “recostarse sobre la que ya tiene”; no perder terreno o bien no sufrir una derrota catastrófica en las elecciones de medio término. Pero la posibilidad de que el peronismo se unifique abajo de Cristina parece, incluso con la carta, un poco lejana.
“Cristina se juega a su supervivencia, a no ser lanzada al olvido” dice Hernán Madera.
Algo que no pasó desapercibido para los analistas es que Axel Kicillof, no se ha referido (aún) a la candidatura de Cristina, dejando un vacío aún mayor en la relación entre ambos tras la distancia que aporto los desencuentros entre Máximo y el gobernador bonaerense.
Por otro lado, dentro del peronismo están convencidos de que Quintela no va a bajar su candidatura. Incluso esto, se venía planteando desde la semana pasada cuando el rumor corrió fuerte. Por estos días, el gobernador riojano se había referido a una posibilidad concreta de disputar la interna con Cristina, si ella lanzará su candidatura. Algo que ratificó en las últimas horas.
El otro punto es que tipo de relación hay entre los kirchneristas y los libertarios. Desde la llegada de Milei a la gestión ha habido múltiples acusaciones, por los funcionarios que se mantuvieron en sus cargos, por las no auditorías realizadas, por una oposición aguada respecto de algunos ejes que han sostenido históricamente.
Al respecto, Madera dice que esto podría definirse como una estrategia para tapar esos eventuales acuerdos que terminan haciéndose evidentes cuando, por ejemplo, los decretos de necesidad y urgencia se cuestionan pero no terminan de caer, los vetos no caen y no se juntan los dos tercios para contraponerse a La Libertad Avanza. En este contexto de reorganización para los peronistas, aunque sea muy de apoco los libertarios ganan cada vez más terreno dentro del Congreso.