Hoy el fiscal, Diego Luciani, terminó con los alegatos contra Cristina Kirchner en el juicio de la causa por la obra pública y en consecuencia, presentará el pedido de prisión para la vicepresidenta.
En ese marco, el funcionario solicitó la inhabilitación de por vida de todos los acusados para ejercer cargos en la función pública y, sobre el delito denunciado, aseguró que se trató de «la mayor maniobra de corrupción que se haya conocido en el país«. Por lo tanto era «un sistema de corrupción institucional» en el que «la corrupción era la regla». «El estado de derecho quedó rezagado y este desequilibrio debe corregirse con un fallo judicial», recalcó.
Sin guardarse nada aseveró que se juzga «la mayor maniobra de corrupción conocida en la historia del país» y remarcó que «el orden público ha sido trastocado por una asociación ilícita dirigida por Cristina Kirchner como jefa».
Luciani arremetió contra la exmandataria y sostuvo que «su condición de presidenta de la Nación en el momento de los hechos hace que haya defraudado al Estado y a sus votantes» debido a que «era la máxima autoridad e interpuso su interés personal sobre el interés público».
Es por eso, que remarcó que «incumplió todo aquello por lo que juró al asumir y defraudó la confianza de la ciudadanía» e insistió: “Cristina Fernández ostentaba la máxima jerarquía y usó sus competencias y su poder para alcanzar el lucro final de esta maniobra, priorizó el interés personal sobre el interés público».
Por lo tanto, aseveró que los hechos por los que se denuncia a la titular del Senado son valorados «de manera negativa» y puso el foco en «el desprecio demostrados hacia la ciudadanía por usar fondos públicos para fines personales, a los ciudadanos de Santa Cruz en lo particular que no vieron concluidas esas rutas, a los empleados de Austral Construcciones despedidos en pos de ocultar la maniobra».
En ese punto agregó que «en la defraudación han intervenido al menos 12 personas» e hizo hincapié en que «solo la intervención articulada de todos los funcionarios, en connivencia con Lázaro Báez, permitía el éxito de la maniobra».
El fiscal se centró en el empresario y lo definió «como el niño más mimado de las más altas autoridades», además afirmó que «parte de los ingresos ilícitos de Lázaro Báez fueron al patrimonio personal de Néstor y Cristina Kirchner» y agregó que «en todo momento se intentó beneficiar a las empresas de Lázaro Báez».