Tras el fallecimiento de Néstor Kirchner, los hijos de la vicepresidenta heredaron tierras en Santa Cruz, compartidas con Austral Construcciones, que están siendo ejecutadas debido a la quiebra judicial de la empresa.
La mitad del terreno indiviso de 87.000 metros cuadrados fue ofrecida en remate por segunda vez a U$S 106.500 pero no recibió ofertas a pesar de haber disminuido su valor en un 40% luego de haber quedado vacante en una subasta en diciembre pasado.
Las tierras se encuentran frente a Lago Argentino, en Punta Soberana. Fueron adquiridas en 2006 a $1 el metro cuadrado y formaron parte de la causa que terminó en la condena al empresario.
La historia de cómo llegó la propiedad a manos de la firma de Báez se remonta al momento en que Cristina amplió el hotel Los Sauces sobre terrenos del ladero de Kirchner, los cuales pagó con la mitad de estas tierras y que se pusieron a nombre de Austral Construcciones. Después de la muerte de Néstor Kirchner y de empezar a ver en riesgo sus propiedades, Cristina transfirió su parte a Máximo y Florencia, quienes pasaron a ser parte dueña del condominio junto a la empresa santacruceña.
El objetivo de la subasta de estas tierras, ordenada por la jueza María José Gigy Traynor, junto a otras propiedades, es pagar a acreedores de la constructora y al Estado Nacional.
