El presidente Javier Milei participó este fin de semana de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) que se realizó en Brasil, en donde criticó las ideas del socialismo, pero evitó generar nuevos cruces con el mandatario de dicho país, Lula Da Silva.
En su discurso, el jefe de Estado argentino expresó que los gobiernos socialistas de izquierda han generado en América Latina una “verdadera receta del desastre tanto en lo económico, en lo social, en lo político y en lo cultural”, y que su modelo “va directamente en contra de la naturaleza humana y necesariamente deriva en esclavitud o muerte”.
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Al respecto, consideró que “lo único que les interesa a los socialistas es el poder por el poder mismo”. Afirmó que “se enamoran de la popularidad generada por la bonanza que heredaron” y “aumentan indiscriminadamente el gasto público para sostenerla”, cayendo así en el que él considera “el peor de todos los males” que es la emisión monetaria.
También cuestionó los procesos electorales que se dieron en los últimos años en el continente y mencionó que “los mismos que se llenan la boca hablando de la democracia, del pluralismo y de opresión, son los que están dispuestos a torcer las reglas e inclusive interrumpir el orden constitucional para atrincherarse en el Palacio cuando el pueblo reclama el cambio”.
En ese sentido mencionó el caso de Venezuela como “una dictadura sanguinaria”; la reelección de Evo Morales en Bolivia para “un tercer mandato inconstitucional” y el actual “falso golpe de Estado” de Luis Arce; y defendió a Jair Bolsonaro al cuestionar que es víctima de “persecución judicial”
Si bien no se animó a mencionar a Lula, con quien tuvo fuertes cruces que tensaron la relación entre ambos países, el Presidente argentino apuntó: “Vean cómo viven los hijos de alguno de los líderes de su propio país, son todos multimillonarios que viven como si hubieran inventado Google”.
Javier Milei junto a Jair Bolsonaro. REUTERS/Anderson Coelho
En cuanto a Argentina comentó que es “un caso intermedio”, ya que “su punto de comparación es el horror humanitario que han sido otras dictaduras asesinas de la región como Cuba, Nicaragua y Venezuela”.
En este contexto, aseveró que el país transita “un momento excepcional en su historia donde la sociedad por primera vez en décadas rechaza el modelo estatista”, y volvió a apuntar contra la oposición que “haciendo lo imposible para boicotear la única salida al desastre que ellos mismos generaron”.
“Somos el gobierno que más palos en la rueda ha recibido de la historia, y queda claro que no van a titubear en oponerse a todo lo que intentemos sin importar cuánto los argentinos de bien necesiten y demanden esos cambios. No pueden permitir que a la Argentina le vaya bien, porque ellos saben que si a la Argentina le va bien, a ellos les va mal”, enfatizó.
