El Gobierno porteño le solicitó a la Justicia autorización para la utilización de las pistolas Taser, a través de un «amparo por mora» para destrabar su importación y que los efectivos de la Ciudad puedan usarlas.
Acorde con la gestión de CABA, el Gobierno Nacional colocó trabas a la importación. Se trata de 60 dispositivos modelo X2 que habían sido autorizados por la ANMAC por un funcionario pero después se dejó sin efecto esa resolución.
En consecuencia, el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad exigió ser parte del trámite para que pudiera llevarse adelante la importación en mayo pasado pero no lo consiguió. Por lo tanto, aun no se habilitó la entrada formal de las Taser y su uso.
A través de un comunicado, el ministro de la cartera, Marcelo D´Alessandro sostuvo que «el problema del Gobierno Nacional es ideológico, y que llegaron a comparar las Taser con las picanas de la dictadura» y remarcó que «demonizaron el uso de estas armas y trabaron una herramienta fundamental para la seguridad de los 3 millones de porteños y las casi 4 millones de personas que diariamente ingresan a la Ciudad».
Según indicó la gestión de CABA, las Taser provocan una descarga eléctrica que deja inmovilizado al supuesto agresor, «por lo que son ideales para actuar en espacios reducidos con abundancia de público. Cuando son disparadas, unos dardos guiados por un cable envían 400 volts durante cinco segundos», precisó el funcionario.
Para concluir, aseveró que «el objetivo es dotar a la Policía de la Ciudad de un armamento que le permita a sus efectivos protegerse y cuidar a los transeúntes y a los actores pasivos del hecho sin poner en riesgo la vida del atacante» y recalcó que «es absurdo que nos impidan usar armas de baja letalidad que funcionan en casi todo el mundo y que permiten resolver situaciones muy particulares sin tener que lamentar muertos».
Es absurdo que nos impidan usar armas de baja letalidad que funcionan en casi todo el mundo y que permiten resolver situaciones muy particulares sin tener que lamentar muertos.
— Marcelo D'Alessandro (@MarceDaless) October 18, 2022
EL LADO B DE LAS TASER
Acorde con Amnistía Internacional, su mal uso puede ocasionar tratos crueles, inhumanos o degradantes y hasta torturas, en casos en los que su utilización no esté justificada o tenga el fin de castigar.
La entidad internacional de derechos humanos subrayó que hubo casos en los que la muerte de ciertas personas estuvo vinculada con la utilización de esta clase de armas.
Frente a ese panorama, Amnistía Internacional dejó en claro sus preocupaciones en cuanto a su uso, y solicitó que se aplique el mismo criterio establecido para la utilización de armas de fuego, a raíz de los riesgos que pueden generar en la integridad física y mental del individuo sobre el que se usa.