El gobierno de Javier Milei ya empezó a llevar a cabo modificaciones en la política exterior. La canciller, Diana Mondino, ordenó el traslado a Buenos Aires de siete embajadores y la finalización de las funciones Atilio Berardi Hueda, el representante argentino ante la Unión Europea.
Los diplomáticos que fueron removidos de sus cargos son: Gustavo Teodoro Grippo, que representaba a nuestra nación ante la República Democrática Federal de Etiopía; María del Carmen Squeff, que se desempeñaba ante la Representación Permanente en Naciones Unidas; María Fernanda Silva, al frente de la representación ante la Santa Sede; Daniel Costantino, a cargo de la Embajada en Francia; Javier Esteban Figueroa, quien llevaba las tareas diplomáticas en el Reino Unido e Irlanda del Norte; Federico Villegas, al frente de las instituciones internacionales en Ginebra; Hugo Javier Gobbi, en representación en la República de la India; y Eduardo Antonio Zuain, embajador en la Federación de Rusia.
El Papa dejó de lado las críticas de Javier Milei, pero puso en duda su viaje a la Argentina
Todos son embajadores de carrera del Servicio Exterior de la Nación, que por ahora regresarán a la sede del ministerio de Relaciones Exteriores en la ciudad de Buenos Aires.