La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, rompió el silencio tras la polémica por los alimentos almacenados y los rumores de una posible renuncia a su cargo.
La funcionaria fue clara y aseguró: «No voy a renunciar. Vine acá por mi amigo y a mi amigo solo no lo voy a dejar».
«Es muy difícil seguir adelante, pero no voy a abandonar«, afirmó y sostuvo: «Primero porque vine acá para bancar a mi amigo, y a mi amigo solo no lo voy a dejar», repitió y agregó: «Segundo, porque creo que a la Argentina la cambiamos entre todos y sacando la mugre, y yo la voy a seguir sacando».
La integrante del Gobierno, según confirmó Infobae, brindó estas declaraciones en un encuentro que hubo en redes sociales ayer a la noche, organizado por el youtuber Matías Herrero.
En este contexto, confesó: «No me quiero poner a llorar, porque después dicen que ando lloriqueando por ahí».
Y manifestó que atraviesa un presente «muy difícil, porque no me iba dando cuenta de los callos que iba pisando».
Acto seguido, dejó en claro: «Yo soy una de ustedes» y aseveró: «Metí los pies en el barro y no los voy a sacar, hagan lo que me hagan».
«Ya estoy adentro y no voy a parar, porque pienso que si bajo los brazos, todo lo que hice hasta ahora no va a valer la pena», expresó y reconoció: «A veces me meto en ministerios ajenos, pero la verdad que las mafias son peor de lo que yo pensaba».
Sin guardarse nada, aseguró que «está la mafia de los políticos corruptos, los empresarios prebendarios a los que no les quiero pagar, la casta periodística, que es de la peor calaña, que me pegan día y noche todos los días. 24 horas dándome, diciendo mentiras, mentiras absolutas».
Y resaltó: «El trabajo que estamos haciendo con el equipo de Capital Humano es impresionante, y más allá de que digan que cometemos errores y que hacemos las cosas mal y que somos unos inútiles, es todo lo contrario, el problema es que estamos tocando los negocios y no se la bancan».
Por lo tanto, alertó: «Van a ensuciarme, van a decir que hago mal el trabajo que soy una inútil».
Y cerró: «Pero la verdad que si soy inútil y no saber gestionar es no saber robar, soy una inútil. Lo que no hacemos es robar ni permitir que roben».
