El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, se metió en el debate por el uso de las pistolas Taser que se reabrió luego del crimen de una oficial de la Policía de la Ciudad en Retiro.
Maribel Zalazar, quien se desempeñaba en la División Subtes Líneas C, D, E y H, fue atacada por un hombre a quien intentó ayudar por un problema de salud, que le robó su arma reglamentaria y la mató de dos disparos.
Tras el hecho, desde el Gobierno porteño recriminaron a Nación por la negativa a implementar las armas no letales, y Berni se mostró a favor de su uso por parte de las fuerzas de seguridad.
“No solamente son necesarias, también imprescindibles”, expresó el funcionario de Axel Kicillof en diálogo con Radio 10, quien aseguró que el uso de estos dispositivos “ya no se discute más en el mundo”.
Sin embargo, el ministro de Seguridad bonaerense expresó que lo que pasó ayer en la estación Retiro del subte fue “un accidente fatal”, ya que ocurrió de forma imprevista.
“Nadie en su buen juicio puede prever que una persona descompensada que está recibiendo ayuda pueda entrar en un estado de excitación como en el que entró y termine en la tragedia que terminó. Después podemos analizar diferentes circunstancias, pero no creo bajo ningún punto de vista que haya sido una negligencia o una falta de Taser”, señaló.
En ese sentido, mencionó que el debate sobre las armas no letales en el país solo se discute “cuando tenemos este tipo de inconvenientes” y genera “discusiones que no llevan a ningún lado”. Además, puntualizó sobre el rol de las fuerzas de seguridad.
“¿Qué hubiese pasado si esta policía en vez de atender a este delincuente le hubiera apuntado con un arma como prevención? Seguramente estaría siendo juzgada”, manifestó.
Al respecto, Berni pidió cuestionar “qué rol queremos que tenga la policía y como queremos que actúe”, ya que luego se critica a los efectivos “si hace porque hace y si no hace porque no hace”.
