Este domingo 28 de julio se llevarán a cabo las elecciones presidenciales en Venezuela y los millones de venezolanos que se vieron obligados a irse a otro país, desean ejercer su derecho al voto. Sin embargo, muchos de ellos se encontraron con distintas dificultades y no podrán hacerlo.
De los 8 millones de migrantes y refugiados venezolanos que hay en el mundo, alrededor de 5 millones tienen la edad para votar. Pero solo se habilitó a 69 mil, es decir, se excluyó al 25% de la población venezolana de la elección
En Argentina, de 220 mil migrantes venezolanos que hay, se estima que 150 mil tendrían edad para votar. Pero se autorizó únicamente a 2.638.
Liset Luque, activista de Derechos Humanos, conversó con Newsweek Argentina, y lo primero que manifestó fue que se encuentra «muy emocionada y muy expectante, con una ansiedad que nos desborda» y agregó: «Creo que ese es el sentimiento que nos describe hoy a los venezolanos».
Luego al hablar de números y hacer hincapié en que solo 2.638 venezolanos podrán votar el domingo en Argentina, la entrevistada dejó en claro que «una de las cosas que lamentablemente vivimos los venezolanos en el exterior es la violación a nuestros derechos políticos».
En esa línea precisó que «más de 220 mil venezolanos residen en Argentina y alrededor de 2.638 son los que efectivamente van a poder ejercer su derecho al voto este domingo».
«Además, el único centro electoral es la Embajada«, marcó y señaló que «eso incluye no solo a los venezolanos que viven en Buenos Aires si no también venezolanos de otras ciudades que probablemente tengan que movilizarse para venir a ejercer su derecho al voto».
«Eso no pasa nada más en Argentina», subrayó y afirmó: «Pasó también en otros consulados o en otros países como en Cuba». «Hace rato estaba conversando con mis primos que están en Ecuador y en Ecuador ni siquiera se va a poder votar porque cerró la Embajada», puntualizó.
Ante este panorama, aseveró: «Esto constituye uno derecho más que el régimen nos limita».
Respecto al hecho de que si menos votos de venezolanos que están en el extranjero se traducen en menos votos para la oposición, la entrevistada expresó: «Yo tengo una esperanza muy grande porque así como muchos no pudieron inscribirse para votar, hoy lo que estamos viendo en el aeropuerto de Maiquetía (el aeropuerto principal) es que muchos venezolanos están retornando para ejercer su derecho».
«Esto es muy importante porque los familiares que estaban desmotivados, debido a que, se perdieron a sus hijos, se perdieron las navidades, los momentos especiales, van a salir a votar por los que están afuera, que no van a poder ejercer su derecho al voto», resaltó.
Como ejemplo, Liste hizo referencia a su situación personal y relató: «Yo soy una de las venezolanas que pude actualizar mi registro electoral acá, pero después de estar todo un día en la Embajada, se demoraron entre 30 y 40 minutos por persona». En este punto, recalcó que «si vos hablás con cualquier venezolano en la calle, vas a ver que la mayoría no se pudo registrar».
Sobre el desarrollo del proceso electoral, detalló que «esta mañana ya llegó el material electoral a Argentina» y destacó que «en esta elección, el rol protagónico también lo tienen los testigos electorales, que es lo que en Argentina se conoce como fiscales». «Son quienes van a garantizar la transparencia, el cuidado del voto hasta el escrutinio y así garantizar que la participación sea lo más transparente, rápida y correcta posible», marcó.
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Al ser consultada sobre si la posibilidad de un cambio les hace pensar en volver a su país, Liset se emocionó y compartió: «Por supuesto que nos emociona pensar en el reencuentro, sobre todo quienes en estos tiempos vivimos pérdidas dolorosas y no pudimos darle a esos seres queridos un último adiós».
«Yo soy madre de dos hijos, llegué con ellos a Argentina hace siete años, y hoy es una pregunta que tengo que poner sobre la mesa», admitió y agregó: «Lo estamos conversando, no solamente yo estoy ansiosa, mis hijos también se preguntan qué va a pasar en Venezuela, y qué vamos a hacer mamá si hay un cambio».
«Pero yo creo como dijo María Corina Machado, un paso a la vez», señaló y explicó: «Ese pasito de retornar, que es el deseo de muchos, tiene que venir de una decisión acompañada porque para las familias que hoy han constituido unos nuevos núcleos familiares fuera de su país, el retorno implica una decisión».
«Por eso, hemos trabajado muchos años los activitas», recordó y enfatizó que «es una decisión que se tiene que tomar en familia, conociendo también cuáles son las garantías de volver a casa».
Aquí colocó el acento en que «no podemos olvidar que si bien el proceso electoral es el domingo y seguramente en la madrugada del lunes vamos a estar conociendo los resultados electorales, la transición de ese proceso recién sería en enero».
«Entonces, hay un lapso de tiempo en el que particularmente los activistas y las familias necesitan tener ciertas garantías«, aseveró al tiempo que manifestó que «por supuesto la vocación de regresar, de poder reencontrarse con la familia y de poder transitar libremente nuestro país es lo que nos mueve».
«A mí me emociona el pensar que voy a poder comprar un boleto de avión de regreso a Venezuela sin tener que preocuparme por si voy a ser perseguida por mis declaraciones acá en Argentina o si mis hijos van a poder tener acceso a ciertas cosas que fue justamente por las que nos vinimos: la garantía del acceso a los servicios, a la educación, a la salud y otros derechos humanos que todos estos años han sido vulnerados por el régimen».
