Mauro Stendel, el empresario argentino que mandó 256 palas a la Cámara de Diputados, charló esta mañana con Manuel Adorni en Radio Rivadavia y explicó que la decisión tuvo que ver con «lo que no se hizo el año pasado» e hizo hincapié en que se llevaron a cabo «solo 15 sesiones» y «se aprobaron 26 leyes».
Frente a ese panorama, remarcó que «la gente que va a ‘trabajar ahí’ tiene un sueldo de más de medio millón de pesos, son 180 y pico de millones al mes». En un paralelismo sostuvo que «si en mi compañía algo está yendo a pérdida o no está saliendo a flote, me quedo despierto 24/7 para sacar eso adelante, solucionar el problema» por lo que sin guardarse nada, lanzó: «El país se está cayendo a pedazos y los políticos, que son quienes tienen el poder de mejorar la situación, de hacer reformas, ni siquiera se presentan en sus bancas«.
Como ESTOY HARTO de que en mi país se labure para mantener vagos, hoy les mandé una sorpresa a los que menos laburan y mas cobran 😉 pic.twitter.com/JH79FmqTzC
— Mauro Stendel (@MauroStendel) February 2, 2023
Al ser consultado acerca del motivo por el que envío 256 palas si los legisladores son 257, el entrevistado explicó que «a Javier Milei no le mandé porque considero que el trabajo que él está haciendo para combatir el socialismo nacional e internacional y el zurdaje es bastante arduo».
Stendel vive en Miami, Estados Unidos, y allí se dedica a los bienes raíces y al e-commerce. Al contar cómo fue su inicio y crecimiento en los negocios aseveró que sus proyectos no hubiesen funcionado en la Argentina, debido a que, «es una sociedad que demoniza al emprendedor y al empleador, es decir, a la persona que genera y desarrolla». «Y el tener ese estigma de ser ‘el malo de la película’ ya te genera una mala energía laboral», sostuvo.
En esa linea subrayó que «tengo muchos amigos y conocidos que son empresarios en Argentina y me cuentan de las condiciones de contratación con los gremios que hay, el querer sacarle todo al empresario es terrible» y agregó que «lo otro son los impuestos: para las palas tuve que pagar IVA«. «Además, la persona a la que le compré las palas, tuvo que pagar impuestos de su ganancia sobre una venta que yo ya pagué los impuestos», marcó por lo que afirmó «de 1.000 dólares que vos tengas por una venta en Argentina, a la larga cada centavo va a ir al Gobierno«.