Jorge Geffner, médico inmunólogo e investigador del Conicet, conversó esta mañana con Antonio Fernández Llorente en La 990 sobre la nueva variante del coronavirus llamada «perro del infierno» y lo primero que aclaró fue que «el nombre es un poquito exagerado».
En esa línea explicó que «todo lo que está circulando son linajes derivados de aquello que surgió hace un año ya, que es la cepa Omicron» por lo que indicó que «seguimos en el terreno de Omicron que va cambiando».
Por lo tanto, precisó que «ahora surge esta nueva variante que es preponderante» y remarcó que «ya el día de ayer era preponderante en los Estados Unidos y nosotros tenemos un 20, 30% de casos«. Sobre la cepa en si, detalló que «tiene muchas similitudes con las otras, no es más agresiva que las demás, pero tiene mayor capacidad infecciosa porque ‘aprendió’ a evadir un poco la acción de los anticuerpos».
«Por eso, preocupa porque es muy infectiva en un escenario de mucha gente vacunada y también muchos de ellos han sido infectados», subrayó y recordó que «en diciembre, nosotros pasamos de 7.000 a 70.000 casos detectados por semana y de 7 a 70 fallecimientos también semanales». En consecuencia, aseveró que «es un panorama que amerita ciertas medidas» y enumeró: «En primer lugar, refuerzos a full: terceros, cuartos y quintos y después, en los lugares cerrados con mucha concentración de gente como subtes o colectivos y más en horas pico, volver al barbijo«.
Sobre el tapabocas, consideró que «no tendría que ser obligatorio porque habría mucha resistencia» pero sí «una campaña de difusión muy importante en el sentido de lo que se considera conveniente. Fundamentalmente, para las personas mayores de 50 años o aquellas que padecen comorbilidades más allá de la edad», debido a que, «sufren las peores consecuencias».
Ante ese contexto, hizo hincapié en que «el punto es que si en los próximos días vemos que esta nueva variante realmente se vuelve predominante en la Argentina va a costar que baje la curva, se va a mantener en niveles altos por un tiempo». Acerca de su letalidad, sostuvo que «es menos letal (que las otras) si la comparás con la variante original, que es la de wuhan, ya que, tiene una mayor tendencia a replicar fundamentalmente en nariz, boca y garganta. Las otras hacian eso, pero había una tendencia después a progresar al pulmón para causar una neumonía que es lo que preocupa».
No obstante, remarcó que «es entre comillas porque es muy difícil discernir qué es responsabilidad de la variante y cuánto está llevando las vacunas que es enorme» y sostuvo que «muchas veces hay una confusión con las vacunas«. «Las vacunas están haciendo lo suyo que es protegernos enormemente frente a la infección severa, pero la capacidad de estas nuevas variantes de evadir los anticuerpos hace que estés muy blindado frente a la infección severa, pero mucho menos blindado en cuanto a padecer una infección que se aloje en nariz, boca y garganta«, explicó.
