Tras varios meses de la promulgación de la Ley 27. 642 de Promoción de la Alimentación Saludable, el etiquetado frontal ya tiene fecha para comenzar a aparecer en las góndolas.
De acuerdo a lo establecido en el Decreto Reglamentario 151/22, este mecanismo se implementará con un cronograma de adecuación en dos etapas a partir del mes de agosto.
Según informaron desde el Ministerio de Salud de la Nación, los envases de alimentos y bebidas elaboradas por grandes empresas a partir del 20 de agosto deberán contar con los sellos en las góndolas.
En la segunda fase, que contempla a los productos elaborados por empresas pequeñas o medianas, el plazo para incorporar el etiquetado frontal se extenderá hasta el 20 de febrero de 2023.
Desde la cartera comandada por Carla Vizzotti señalaron que la implementación “se irá dando de manera gradual, y en el caso de algunos envases específicos requerirá un plazo mayor para ajustar la información”.
Al respecto, mencionaron que se registraron 2.658 solicitudes para prorrogar su implementación por parte de 236 empresas, de las cuales se aprobaron cerca del 35%.
Los principales rubros que lo pidieron fueron golosinas, mermeladas, jaleas, dulces y confituras (21,62%); panificados y galletitas (15%); embutidos y conservas cárnicas (14,45%); lácteos (11,27%); y bebidas analcohólicas (10,63%), entre otros.
El etiquetado frontal, que fue aprobado tras un amplio debate en el Congreso, tiene como fin informar a los consumidores sobre el contenido en exceso de azúcares, grasas totales, grasas saturadas, calorías y sodio en alimentos envasados y bebidas analcohólicas.
Con estas leyendas que se encontrarán en los envases, se busca que todos tengan acceso de forma clara a esta información para “elegir y comprar con conocimiento sobre el producto alimenticio” y “garantizar una alimentación saludable y adecuada de la población”.
