Edgar Calandín, jefe del Comando Conjunto Antártico (Cocoantar), habló con Alfredo Casado en la Radio 990 sobre el hecho de violencia que ocurrió en la Antártida cuando un militar atacó a un compañero con un martillo mientras dormía y precisó que el episodio «ocurrió el domingo a la noche en la base Marambio. Un suboficial que está en el ejercito le hizo dos golpes en la cabeza y una en la cara con un elemento contundente al encargado de la base que era de la Fuerza Aérea«.
En esa línea indicó que «se realizaron los estudios médicos y luego los dos fueron evacuados». «Al agredido se le hizo una tomografía computada en Río Gallegos y no se detectaron daños y al otro (al agresor) se le iniciarán las actuaciones de Justicia Militar más la denuncia penal correspondiente en el juzgado federal de Tierra del Fuego«.
Acerca de las razones que llevaron a este episodio, el entrevistado detalló que «en la Antártida hibernan entre 200 y 250 personas en la base permanente», y agregó que «reciben una preparación de casi un año, con test psicológicos con un equipo de 14 profesionales«.
«Pero, la convivencia en la Antártida en ambientes confinados es una olla a presión que va acumulándose», remarcó y es por eso, que hizo hincapié en que «hay que estar muy atentos cuando ocurren peleas o rencillas».
Frente a ese panorama, aseguró que «nunca había ocurrido un hecho así por lo que es algo inédito» al tiempo que sostuvo que «en la actualidad, el comportamiento social es más complejo«. Sobre este episodio, contó que el agresor era de menor edad y más chico también físicamente que el agredido.
Para concluir, aseguró que «la apertura mental es total en las Fuerzas Armadas promovida por el Ministerio de Defensa».