Una turista de Mar del Plata se convirtió en el centro de atención en redes sociales después de que un restaurante de comida rápida le negara la entrada debido a su vestimenta.
La joven llevaba un corpiño con una pollera transparente, lo que aparentemente incomodó a los empleados del lugar.
La empleada que la atendió le informó que, según la política de la empresa, debía retirarse del lugar o ponerse una remera. Sin embargo, la turista decidió seguir grabando un video sobre lo que consideraba un trato injusto y se quedó a comer en el lugar.
El video se volvió viral y generó un fuerte debate en redes sociales.
Muchos usuarios reclamaron que si el restaurante tiene normas de vestimenta, deberían estar escritas en algún cartel en la puerta. Otros defendieron la decisión del restaurante, argumentando que la vestimenta de la turista era inapropiada para un lugar familiar.
El incidente ha generado una discusión sobre la libertad de expresión y la responsabilidad de los negocios en cuanto a la vestimenta de sus clientes. Mientras tanto, la turista ha convertido su experiencia en un tema de debate en redes sociales.
