«¿Por qué serías relevante a 10 años desde ahora?», fue la pregunta disparadora que planteó Martin Wezowski, Chief Futurist Officer de SAP, en la presentación de la red de SAP AppHaus Network en las oficinas de la empresa Globant, a la que Newsweek Argentina fue invitada.
«Tecnología y humanidad siempre juntas», fue lo primero que marcó el miembro de la «Red Global de Prospectiva» del Foro Económico Mundial (WEF) e integrante del cuerpo docente de Futur/IO. En ese sentido, indicó que en el futuro, hay que llevar a cabo políticas sociales.
Respecto a la importancia de ser «relevante», afirmó que «ese es el trabajo de una empresa. La clave está en el comportamiento». También sostuvo que «la imaginación tiene que ser una de las actividades de la empresa: interactuar con los otros, contar historias, enfocarnos en las pasiones».
Luego se refirió a los riesgos y aquí realizó un paralelismo con el mundo del deporte: «El futuro es una acción deportiva, se siente mal cuando vas bien debido a los riesgos, a lo que no puede predecirse».
Más allá de aquello a lo que una companía no puede anticiparse, el experto puso el foco en lo fundamental que es tener un «propósito».
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Respecto a la relación entre la tecnología y el ser humano, dejó en claro que «la tecnología debe adaptarse al ser humano» porque si el hombre «no es autónomo del network», qué pasa si hay «un conflicto», ya que, el universo tecnológico, según advirtió, «es directo pero frágil».
Por eso, «el mayor desafío de cara al futuro, es construír relaciones humanas».
En esa línea, planteó: «Si solo ejecutamos somos una máquina» y reflexionó: «Que la tecnología no me cambie a mí más de lo que yo puedo cambiar a la tecnología, sino quién es la máquina si la máquina me dice a mí qué hacer».
«Nos volveremos humanos al final, ahora somos robot«, manifestó.
En ese sentido, precisó que «la tecnología no puede construír mejores relaciones que los humanos, no puede escuchar, no puede crear ese ámbito de intimidad, no cuenta con subjetividad por lo que no puede formular opiniones, reflexiones y tampoco crea negocios«. Aquí introdujo a la Inteligencia Artificial (IA) y aseveró que «el valor de la IA va a estar en leer al ser humano».
Por lo tanto, «hay que usar la tecnología para hacer realidad una idea, que es el trabajo humano. Automatizar lo que se puede porque el ser humano no es automático, es raro, cambia todo el tiempo».
Y agregó que por eso, «hay que explorar cuáles son las buenas opciones antes de ejecutar sino podés ser muy correcto en la dirección errónea», alertó. Propuso, «usar la IA para investigar».
También sumó que es muy importante «contar con distintos puntos de vista para luego formular una estrategia» y consideró que «la filosofía debería estar incluida en los negocios para tener una mirada inteligente, ya que, esta disciplina, aportaría el por qué hacemos una determinada acción».
«LOS LÍDERES PUEDEN EQUIVOCARSE»
Sobre el rol de los líderes, sorprendió al decir que «pueden equivocarse porque para corregirlos están los expertos» por lo que «deben contar historias, mostrar su corazón».
A su vez los alentó a «discutir con todos» a fin de «estar todos conectados en el hacia dónde vamos».
«HOY LAS HABILIDADES HUMANAS NO ESTÁN AL ALCANCE DE TODOS»
Wezowski admitió que las habilidades humanas «hoy no están al alcance de todos» pero se mostró optimista al poner como ejemplo que «en su momento, la educación tampoco lo estaba» y afirmó que si bien «el mundo es un mejor lugar para vivir en el futuro, el hoy es preocupante».
Por lo tanto, puso el foco en que si la persona no es experta en determinado tema, igual debe estar incluída para poder aprender, es decir, «¿Cómo invitarías con esta nueva tecnología a gente que nunca invitaste a tu negocio?»
«La herramientads deben ser inclusivas, democráticas todo el tiempo. La misma inclusión debe ser una herramienta en si», recalcó y añadió que esta es una pregunta para «las empresas y los gobiernos».
En cuanto a la llegada de la tecnología, adelantó que «en el futuro será cada vez más barata» y en consecuencia, «la gente de los lugares más humildes, aprenderá tecnología con un teléfono barato».
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¿REGULAR LA TECNOLOGÍA, SÍ O NO?
Respecto a las regulaciones, sostuvo que «las regulaciones tienen que estar en las bases, regular las aplicaciones para no hacer cualquier cosa, pero no regular la búsqueda».
DESAFÍO AMBIENTAL
En referencia al desafío ambiental, planteó: «No podés discutir con el agua sucia. Tenemos que prepararnos porque aun no tenemos las herramientas para unir la idea de sustentabilidad con la idea de un mejor negocio» y para ello, «hay que cambiar de actitud».
