En los últimos días, las Cataratas del Iguazú mostraron una imagen que hace tiempo no se veía. Una crecida en el río Uruguay generó un gran caudal de agua, que obligó a cerrar el parque para evitar poner en riesgo a los turistas.
Finalmente, el agua logró calmar un poco su fuerza y este fin de semana, pudieron habilitar dos de los circuitos y los paseos nauticos. Sin embargo, aún hay zonas afectadas y se teme por los daños que pudo haber causado en las pasarelas.
Según informaron las autoridades del parque, en los últimos días se abrieron los circuitos inferior y superior, lo que permitió que cerca de 8.000 turistas pudieran disfrutar de este fenómeno que hizo que el caudal del agua en los saltos sea de 10.300 metros cúbicos por segundo.
“Las personas vienen a disfrutar del espectáculo igual por este impresionante caudal, la fuerza del agua que uno ve es inigualable y se puede observar con una vista panorámica todas las cascadas”, dijo intendente del Parque Nacional Iguazú, Atilio Guzmán.
En la misma línea se refirió Leopoldo Lucas, del Ente de Turismo de Iguazú, quien contó a Newsweek Argentina que actualmente el caudal es de 5.000 metros cúbicos por segundos, lo que permite ver en “los saltos en profundidad con un color rojo”.
El circuito de la #gargantadeldiablo
permanece cerrado, y evalúan los daños de las pasarelas ocacionados por la creciente del río. #crecidadelrio #iguazuargentina #cataratasdeliguazu #maravillanatualdelmundo pic.twitter.com/yGSbNUdOSO— Misiones Maravilla (@MisionesMaravi1) October 17, 2022
Sin embargo, aún no se pudo reabrir el camino que lleva a la Garganta del Diablo, el principal atractivo de las Cataratas del Iguazú. Si bien las pasarelas cuentan con un sistema de protección que las hace rebatibles ante una alerta de creciente, aún no pudieron verificar su estado.
“Debido a las crecientes se está evaluando si hay algún daño. Se va a establecer entre hoy y mañana si hay que reparar algo y cuál será el tiempo que lleve para la reapertura”, explicó Lucas.