Después de afrontar meses con las puertas cerradas debido al caos provocado por la pandemia, gracias a la reapertura que hubo en el país a partir del pasado septiembre Sofitel La Reserva Cardales comenzó a percibir cambios alentadores en su nueva realidad: aumento de ocupación en sus habitaciones, pasillos de luces encendidas y movimiento en el lobby. A pesar del auge del turismo de cercanía de Buenos Aires, es cierto que el flujo de huéspedes no está ni cerca de la capacidad máxima del resort, pero sí es una tranquilidad ver que cómo se respeta a rajatabla todos los protocolos sanitarios. El único objetivo es cortar la rutina, relajar la mente y tomar un poco de aire.
A sólo 40 minutos de Capital Federal, el hotel ícono de Cardales es el enclave ideal para desconectarse de la ciudad y sumirse en la excelencia del confort rodeados de la naturaleza. Uno de sus atractivos principales son sus piscinas indoor y outdoor que ayudan a combatir las altas temperaturas veraniegas, la amplia oferta de actividades al aire libre como canchas de tenis y de fútbol, y bicicletas y kayaks disponibles para todos sus huéspedes invitan a la diversión. Para que los más pequeños también se entretengan, el Kids’ Club brinda una agenda de actividades recreativas; mientras los golfistas sacan provecho de su Green fee en el campo de golf de 18 hoyos de nivel internacional.
Además de sus 160 amplias habitaciones de lujo con terraza propia, que incluyen una suite presidencial y tres búngalows flotantes construidos sobre una laguna de 20 hectáreas, aquellos huéspedes que quieran sumergirse en una estadía perfecta de tranquilidad y bienestar deben visitar el Spa de 1500 m2 con un original Circuito de Aguas único en Sudamérica. Propone una amplia variedad de tratamientos en un espacio arquitectónico contemporáneo y de alta tecnología europea.
En la esfera gastronómica propone varios espacios con diversidad de comidas y ambientes. La Butaca ofrece un ámbito relajado con productos de estación y una impactante vista a la laguna y a la cancha de golf. El Piano Bar presenta un clima de mayor intimidad, donde suelen realizarse maridajes y se puede disfrutar de cócteles y tragos, mientras que en el restaurant argentino Le Lac presenta cocina de autor, en un marco de sofisticación y lujo. También se puede experimentar una carta más descontracturada al borde de la piscina.
Este hotel cinco estrellas es el escape perfecto para olvidarse de la vorágine cotidiana e invita a la serenidad, un oasis para compartir en familia, en pareja o entre amigos.
