Actual Country Manager de Flapper, Julio Manco, es reconocido por su trayectoria en el mundo aeronáutico. Y en esta nueva etapa, nos cuenta los planes de expansión y todo sobre la nueva manera de volar.
– ¿Cómo surgió tu pasión por la aviación, y trabajar de lo que más te gusta?
Siempre me gustaron los aviones, y la experiencia de volar. Cuando llegué a Flapper sabía que iba a trabajar en algo que me encanta, que son los aviones en todas sus versiones. Anteriormente, tuve una larga trayectoria profesional que incluyó más de 10 años como abogado Senior en uno de los principales bancos privados que operan en el país y, luego, 4 años en la Administración Pública Nacional, donde estuve a cargo de la Dirección General de Logística de la Secretaría General de la Presidencia de la Nación. Dicho en forma un poco más simple, lideré el área responsable de todo lo relacionado a la flota aérea presidencial durante el mandato de Mauricio Macri.
En 2019, cuando asumió el nuevo Presidente, hice el traspaso de gestión y me fui con la certeza de que había encontrado una nueva pasión en el mundo de la aviación. Y durante la pandemia fui asesor aeronáutico privado y, una vez que se reactivó el mercado, me incorporé a Flapper donde hoy soy Director Ejecutivo y Country Manager LATAM.
– ¿Cómo fue tu experiencia como Director Gral. de Logística de la flota Presidencial?
En esa etapa tuve el desafío de incorporar muy rápidamente conocimientos sobre aeronáutica, desde los diferentes tipos de aeronaves disponibles en el mercado a nivel global y sus características, hasta cuestiones relacionadas al mantenimiento, operación y gestión de todos los “Tango”, que son los diferentes modelos de aviones disponibles en la flota presidencial, y helicópteros.
Fueron años de mucha intensidad porque la actividad presidencial era muy activa tanto a nivel nacional como internacional, y la agenda de un mandatario no puede fallar. Entonces la logística y la gestión de la flota aérea tienen un rol fundamental para garantizar que todo salga como está planificado, aún frente a todo tipo de imprevistos. Tanto es así que, por ejemplo, durante el G20, uno de los eventos que exigió el más alto nivel de planificación y coordinación entre diversas áreas del Gobierno ya que Argentina recibía a los mandatarios más importantes del mundo, surgió una situación realmente inesperada: el Ejército del Aire español contrató un handler privado local para gestionar la llegada de la aeronave en la que viajaba el Rey y, cuando aterrizó el avión en Aeroparque, no contaban con la escalera que se requería para el descenso. Tuvimos que ir hasta el lugar para autorizar el uso de una de las escaleras de la flota presidencial y permitir que el Rey y su comitiva pudieran bajar.
– ¿Cuál es tu visión actual del mercado de aviación privada en Sudamérica?
Comparado con 2019, el mercado de la aviación privada creció un 60%. El aumento es constante y sostenido. En Argentina, por ejemplo, no sólo tenemos cada vez más operacionalidad, es decir más demanda de vuelos privados, sino que también hay más modelos de aeronaves disponibles para ofrecer el servicio de taxi aéreo.
Este fenómeno se da por varios motivos. En nuestro país uno de ellos es claramente la situación actual de la oferta de vuelos aerocomerciales, un sector con valores menos accesibles que los que había hace unos años, que no cubre determinadas rutas y en donde es usual encontrarse con demoras, cancelaciones inesperadas o largas filas de ingreso.
Una de las grandes ventajas de volar con nosotros es que no es necesario volver a Buenos Aires para unir destinos. A eso se suma la experiencia de contar con un equipo especializado cuya prioridad está puesta en satisfacer a los pasajeros, con la posibilidad de diseñar a medida los detalles del viaje: modelo de avión, la cantidad de pasajeros, el tipo de catering, el servicio a bordo o, incluso, las salas VIP disponibles en los aeropuertos. Llegamos para quedarnos. La verdad es que cuando los viajeros exigentes conocen el producto que ofrecemos ya no están dispuestos a bajarse, no hay vuelta atrás. Por eso en Flapper hablamos de que nuestro servicio es un “camino de ida”.
– ¿Cómo es la estructura de negocios de Flapper?
Flapper fue fundada por Paul Malicki en 2016 en Brasil. Somos un marketplace de aviación ejecutiva que ofrece la opción de adquirir servicio de aviación privada a través de la app desde el celular. En menos de 10 minutos y en 8 simples pasos se puede conocer todas las opciones de vuelos, horarios, días y un servicio 100% adaptado a la necesidad de cada pasajero. Es como cualquiera de las aplicaciones que funcionan para pedir un taxi, pero de los aires.
Actualmente tenemos tres unidades de negocios: aviones, helicópteros y compra-venta de aeronaves. Los servicios que ofrecemos son: taxi aéreo convencional, servicios de vuelos sanitarios y de carga; el empty leg (la comercialización de vuelos que vuelven vacíos a un 40% a 60% menos del valor del tramo original); el vuelo compartido por asientos; y Flapper Pool, un taxi aéreo con la posibilidad de que el cliente comercialice los asientos libres a través de la app.
En el caso de los helicópteros, tiene dos tipos: el traslado punto a punto o helitours. Finalmente, la unidad compra-venta de aeronaves, que lleva 5 meses y está centralizada en Brasil. Flapper es líder en América Latina con 25 mil clientes en 20 países. Cuenta con una red de más de 5.000 aeronaves y 200 operadores alrededor del mundo. Posee oficinas comerciales en Brasil, México, Colombia, Chile, Florida (EE. UU.), Portugal (UE), Emiratos Árabes y, en 2021, ,la compañía desembarcó en Argentina y Uruguay.
– ¿Cuáles son los objetivos y proyecciones de Flapper en la región?
Apuntamos a tener una participación de mercado del 10% en los próximos años. Ser la compañía referente de aeronavegación ejecutiva en toda América Latina. Desde 2022 tenemos oficinas de Europa y Emiratos Árabes y este año proyectamos abrir nuevas en Asia. probablemente China.
En Argentina, la empresa es muy fuerte en vuelos compartidos por asiento. Durante el verano esto se reflejó mucho. Este año la firma planea invertir en la región que lidera Manco US$ 1 millón en distintos productos.
El objetivo es desarrollar nuevas rutas de vuelo compartido y alianzas estratégicas con diversos sectores de la industria de los productos de lujo.
– ¿Qué cambios consideras que deberían realizarse en materia de aviación civil y privada en Argentina?
El mercado de la aviación tiene un enorme potencial para desarrollarse en Argentina. Entre 2015 y 2019 hubo avances en ese sentido, con nuevas aerolíneas comerciales low cost y la incorporación de rutas que hasta ese momento estaban desactivadas. Creo que habría que retomar ese camino de apertura de los cielos, profundizarlo y complementarlo con medidas que vuelvan a posicionarnos como líderes regionales en esta industria, como la incorporación de Hubs de distribución en las diversas regiones del país, con aeronaves eficientes para llevar a cabo esa tarea, incentivar el intercambio de tecnología y experiencias, y fomentar acuerdos multilaterales que potencien la aeronáutica nacional
Otro aspecto interesante sería desarrollar un plan de negocios atractivo para poner en valor FADEA y que vuelva a ser una fábrica modelo, a nivel tanto regional como mundial, en lo que es aeronáutica.